Rehabilitación de pozos de registro en Móstoles
En la empresa Desatascos Madrid desde Móstoles nos destacamos como líderes en el área de restauración de arquetas sin recurrir a construcciones adicionales, utilizando una técnica avanzada que consiste en la inserción de un forro hecho de manga vertical compuesto por fibra de vidrio de excelencia química Advantex®, caracterizada por su densidad cercana a los 730 g/m² e impregnado con una solución de resina ya sea poliéster o viniléster.
Rehabilitación de Pozos de Agua
Las intervenciones realizadas con el objetivo de solucionar estas dificultades reciben el nombre de rehabilitación o refacción de pozos. Un proceso de rehabilitación de pozo fructífero propiciará el aumento de la corriente hídrica del pozo. El éxito de la rehabilitación se ve influenciado por la(s) razón(es) originarias del decremento en la eficacia del pozo, así como por la extensión del progreso del inconveniente.
Al percibir una disminución en la eficiencia de su pozo, es recomendable acudir a un especialista en la construcción y mantenimiento de pozos para llevar a cabo una inspección detallada, idealmente utilizando una cámara para exploración subterránea del pozo.
La “capacidad específica” es un termino comúnmente utilizado para cuantificar la cantidad de agua que suministra un pozo, y se define como el volumen de agua bombeada (galones por minuto) sobre la variación en la profundidad del agua al bombear (en pies).
Opiniones de nuestros clientes : Rehabilitación de pozos de registro en Móstoles
Desatascos en Móstoles, empresa mejor valorada en Madrid, reseñas reales
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Juan Carlos Matías
Te resuelven un problema de atranque en 1h. Incluso un viernes noche. Genial
Leer reseñaCarmen Pano Sánchez
Se les llamó el día de Reyes y vinieron en una hora y me solucionaron el grave problema que tenia. Por lo que eficiencia máxima, y el precio del servicio muy bueno. Lo recomiendo al 100%. GRACIAS POR SU AMABILIDAD, ATENCION Y SERVICIO
Leer reseñaPor lo general, un decrecimiento del 25% o más en la productividad del pozo es un indicativo de que se requiere una rehabilitación. El aplazamiento de las tareas de refacción no solamente incrementará los costes asociados, sino que también, en ciertos casos, podría imposibilitar la restauración complet del pozo.
Para identificar la pérdida de eficiencia en su pozo, es necesario contar con un punto de comparación. Habitualmente, este se basa en la información documentada durante la construcción y las pruebas iniciales de la bomba, las cuales suelen ser entregadas por el empresa perforadora en un reporte de finalización o registro del pozo. No obstante, la ausencia de estos datos no hay problema, ya que variaciones notorias en el funcionamiento del pozo igualmente sugieren que el pozo o la bomba precisan de atención. Los cambios significativos en las siguientes características son una señal de que es necesario revisar su pozo o bomba:
- Reducción de la velocidad de bombeo
- Disminución del nivel de agua
- Pérdida de la capacidad específica
- Aumento en la concentración de arena o sedimentos en el agua (turbidez)
- Disminución en el fondo total del pozo
Los dos procedimientos más usualmente aplicados para la rehabilitación de un pozo son:
- Empleo de sustancias químicas destinadas a disolver los depósitos acumulados en el pozo
- Limpieza manual del pozo
Las tácticas manuales comprenden el uso de un cepillo unido a un equipo de perforación, la aplicación de chorros de agua a presión elevada, la fracturación hidráulica y el tamizado de pozos.
El uso de un cepillo acoplado a una máquina perforadora como método de refacción manual.
Las últimas tres estrategias mencionadas anteriormente implican inyectar agua (y en ocasiones sustancias químicas) dentro del pozo con una presión considerablemente alta. Usualmente, los contratistas optarán por la combinación de estos métodos según la(s) causa(s) detrás del deterioro del rendimiento del pozo.
Rendimiento Reducido por Incrustaciones o Bio-incrustaciones
Las obstrucciones de origen químico y biológico son motivos habituales de averías en los pozos. Dichas obstrucciones representan bloqueos materiales que se forman en las mallas de los pozos y en las fisuras o cavidades de las formaciones rocosas que conducen el agua hacia la malla del pozo.
Registro en vídeo de un pozo evidenciando una pronunciada acumulación biológica y química que recubre íntegramente la sección de malla del pozo.
En circunstancias extremas, la interrupción del curso hídrico puede resultar en la inoperancia total del pozo. Las tipologías más comunes de incrustaciones surgen debido a la concentración de sales cálcicas y magnésicas, agregados de hierro y manganeso, o a causa de la obstrucción generada por microorganismos ferruginosos productores de moco y otros entes biológicos análogos (bioincrustaciones).
Tratamiento de Incrustaciones Químicas
La estrategia predominante para restaurar pozos afectados por depósitos químicos consiste en emplear mezclas ácidas potentes que fragmenten y solubilicen las sustancias adheridas.
Una vez que se han desprendido o solubilizado estos residuos, se extraen del pozo mediante bombeo junto con la mezcla ácida para su posterior disposición.
La elección del ácido a utilizar, su presentación (ya sea en estado líquido, en gránulos o en píldoras), las técnicas aplicadas para inyectar y movilizar la mezcla ácida, y la intensidad de la incrustación, son elementos determinantes en la eficacia del tratamiento con ácido. Es frecuente que los pozos de mayor antigüedad, tras recibir tratamiento ácido, restauren su funcionalidad totalmente o incluso alcancen una capacidad superior a la original, siempre y cuando se logre eliminar de manera efectiva todo residuo suelto por la acción del ácido.
Aunque los procedimientos de limpieza con ácido para remover estas acumulaciones son altamente eficaces, se complementan habitualmente con enfoques mecánicos como el empleo de cepillos o la limpieza con cables, para optimizar el rendimiento de estos tratamientos.
Una táctica mecánica menos habitual involucra la ejecución de explosiones controladas. Dicha técnica comprende la utilización de explosivos, ubicados estratégicamente dentro del pozo, con el propósito de quebrantar el acuífero de roca consolidada y los depósitos solidificados. Los conocimientos actuales revelan que, ejecutado de manera precisa, este método puede contribuir a mejorar temporalmente la producción de los pozos. No obstante, es común que las fisuras creadas por la explosión tiendan a llenarse de nuevo con depósitos, haciéndose necesarias futuras intervenciones de rehabilitación para conservar la eficiencia productiva del pozo.
Tratamiento de Bio-incrustaciones
El origen de la bioincrustación o bloqueo biológico en las mallas de captación de pozos y en las fisuras del subsuelo se debe principalmente a microrganismos especializados en el procesamiento del hierro. Estos organismos, junto con otros similares, generan una capa biológica densa y extensa denominada “biomat”.
Cuando se extrae una bomba sumergida de un pozo afectado, no es raro encontrar señales de óxido de hierro, colonias de bacterias relacionadas con este elemento y una biopelícula característica.
El incremento rápido en la población de estas bacterias puede provocar la saturación de los espacios porosos de la malla del pozo de forma acelerada, volviendo al pozo casi inoperante en unos pocos meses. La presencia de bacterias de hierro en un sistema de pozos indica una dificultad notable para su completa eliminación.
El procedimiento para el manejo de estos agrupamientos bacterianos en pozos de abastecimiento pasa por una estrategia de mantenimiento continuo con el fin de preservar un rendimiento adecuado del pozo. Los métodos químicos resultan ser los más eficientes para este fin, aunque la combinación de bactericidas químicos y la agitación física del agua del pozo para deshacerse de los desechos biológicos muestra un rendimiento superior.
El cloro es el agente químico preferido para tratar la mayoría de los pozos de diámetro reducido. Su uso es ventajoso por su disponibilidad, coste asequible y general aceptación por parte de los organismos de salud pública para la potabilización del agua. Para la desinfección estándar tras obras de construcción, reparación o al instalar bombas y tuberías en pozos, se sugiere aplicar una concentración de 50 mg/L de cloro libre. En casos de afectaciones severas por bacterias de hierro, se emplean niveles de 500 hasta 2000 mg/L.
No obstante, la cloración por sí sola podría no resolver completamente el problema de las bacterias del hierro si no se acompaña de agitación del pozo. Una corriente turbulenta incrementa el contacto del lodo bacteriano con la solución clorada y facilita la eliminación de los sedimentos.
Para instrucciones detalladas sobre cómo realizar un tratamiento de cloro de choque en un pozo, le invitamos a consultar nuestro documento técnico sobre Cloración de Choque para Pozos y Manantiales, o bien a contactar a un perforador profesional.
Es importante considerar que la precipitación del hierro producto de la actividad bacteriana puede ser una causa de bloqueo en las vías de flujo, de modo que intercalar tratamientos ácidos con los bactericidas suele dar mejores resultados.
No obstante, es crucial recordar que el cloro y el ácido nunca deben mezclarse dentro del mismo pozo.
Falla Causada por Taponamiento Físico y Bombeo de Arena
Con frecuencia, el declive en la eficacia del pozo a lo largo del tiempo puede deberse a la acumulación paulatina de partículas diminutas que se desplazan desde el acuífero hacia el pozo y su filtro. En ciertas ocasiones, el filtro puede llegar a estar bloqueado. Para prevenir perjuicios en la bomba, la sustitución de un filtro deteriorado podría ser una decisión prudente. Existen múltiples motivos por los cuales puede producirse un taponamiento por sedimentos, tales como:
- Configuración deficiente del pozo (emplazamiento erróneo de la malla, diseño inapropiado de las ranuras, etc.)
- Bombeo inadecuado o un incremento brusco en la extracción para expulsar desechos del pozo (desarrollo del pozo) durante su instalación inicial
- Retirada de compuestos que actúan como aglutinantes en acuíferos y que proporcionan cohesión a la arena
- Deterioro del filtro y/o del revestimiento a causa de la corrosión
- Explotación del pozo por encima de las especificaciones para las cuales fue diseñado
Tratamiento del Taponamiento Físico
La estrategia preventiva esencial para prevenir la obstrucción mecánica de un pozo radica en su construcción óptima. Una construcción idónea asegura que el entorno del acuífero se consolide, evitando que el proceso de extracción posterior genere una eliminación desmedida de sedimento. La expulsión de diminutas fracciones de limo y arcilla, ya sea por la adición en los líquidos usados durante la perforación o por su presencia intrínseca en ciertos acuíferos, demanda la aplicación de métodos químicos específicos.
Como en el caso de otros procedimientos de saneamiento químico, la habilidad de movilizar la sustancia química en el interior y exterior del sistema del acuífero es vital para el triunfo de esta técnica. Dicho proceso de movilización puede lograrse mediante el uso de un compensador hidráulico, aire a presión, una bomba subterránea o un flujo de gran velocidad.
Se acepta ampliamente que la utilización de un flujo de fuerte velocidad constituye el sistema más avanzado de movilización. Durante el reflujo del agua del pozo para su inyección, es imperativo evacuar los residuos antes de su reutilización. La evacuación permanente de los residuos desplazados, tal como se practica en un sistema de reflujo, proporciona los resultados más favorecedores, dado que el agente limpiador logra impregnar con mayor eficacia en la matriz del acuífero.
Falla Causada por Corrosión
La degradación del revestimiento metálico y otros elementos estructurales de un pozo puede mermar drásticamente su durabilidad en diversas formas.
Perforaciones en el revestimiento provocadas por el proceso corrosivo. Los poros de la malla del pozo, al corroerse y expandirse, pueden incidir en la aspiración de arena, lo cual desencadena el desgaste abrasivo de los componentes de la bomba y los poros de la malla dilatados que resultan en una acelerada deposición de sedimentos. Bajo estas circunstancias, los materiales abrasivos desplazados por corrientes de intensa velocidad pueden acarrear la erosión de los poros de la malla. Una malla o forro de pozo que experimente un deterioro corrosivo notable tiene el riesgo de desplomarse por completo. Finalmente, una consecuencia negativa adicional de la corrosión en los pozos es que el agua extraída de pozos gravemente comprometidos podría ser de calidad tan deficiente que sus aplicaciones se vean considerablemente restringidas.
Tratamiento de la Corrosión
El método más efectivo para prevenir o resolver inconvenientes relacionados con la corrosión consiste en elegir revestimientos y enrejados que presenten una óptima resistencia ante este fenómeno. Aunque las enrejados fabricadas con acero al carbono representan una opción más económica en comparación con aquellas de acero inoxidable, tienden a ser más vulnerables al deterioro corrosivo. Es crucial considerar que los procedimientos de recuperación de pozos que emplean una cantidad excesiva de soluciones ácidas pueden acelerar de manera notable la degradación por corrosión.
Falla Causada por Daño de la Bomba
El deterioro en las bombas de pozos de agua frecuentemente se origina por uno o varios de los factores siguientes:
- Extracción de arena o partículas abrasivas
- Oxidación de componentes de la bomba
- Niveles de temperatura en operación demasiado elevados
- Generación de cavitación en la bomba
El desgaste abrasivo causado por la extracción de arena es el motivo principal del averío en las bombas. Desgaste por arrastre de arena. El exceso de sedimentos en el agua extraída de los pozos puede deberse a una configuración inicial deficiente del pozo, la falta de un filtro adecuado en terrenos rocosos frágiles, mallas con aberturas demasiado grandes, una velocidad de flujo del agua a través de la malla del pozo excesivamente alta debido a aberturas inadecuadas o a la oxidación de la malla del pozo.
Tratamiento de Daños a la Bomba
Frecuentemente, un indicativo claro de que es tiempo de realizar mantenimiento en una bomba emergen a la vista. Los motivos más comunes de un fallo en la bomba suelen estar vinculados a aspectos mecánicos, incluyendo elementos como los rodamientos, las empaquetaduras, los rotores y los conjuntos de la carcasa de la bomba. Es esencial llevar a cabo la conservación, reparación y sustitución de la bomba y sus componentes siguiendo las pautas establecidas por el creador del equipo.
En determinadas situaciones, resolver las incidencias repetitivas de bombeo de arena puede llegar a ser excesivamente caro. Considerando los costes a largo plazo, puede resultar más rentable la construcción de un nuevo pozo que la rehabilitación de uno que ha sufrido un grave deterioro. Esto resulta particularmente aplicable en aquellos pozos de escasa profundidad.
No obstante, en circunstancias donde la perforación de un nuevo pozo no es una opción viable, en ocasiones es factible extraer y cambiar un filtro de pozo que se encuentre en un estado de daño severo. Como una solución alternativa se ha empleado la implementación de un filtro de menor tamaño (conocido también como revestimiento secundario) dentro del filtro original del pozo. Adicionalmente, se pueden instalar dispositivos diseñados para estabilizar o minimizar el caudal de agua que penetra al pozo, lo que ayuda a mitigar los problemas asociados al bombeo de arena.
Resumen
Si empieza a notar señales de disminución en la eficacia de su pozo, no dude en ponerse en contacto con un experto contratista de pozos de agua. Revise la National Ground Water Association (NGWA) para obtener un directorio de especialistas en perforación de pozos que sean miembros y estén cercanos a su ubicación. La pronta intervención de estos profesionales para diagnosticar y solucionar el inconveniente aumenta considerablemente las posibilidades de una recuperación satisfactoria de su pozo de agua.
Características generales
- Recuperación de segmentos verticales con una extensión máxima de 10 metros.
- Montaje en excavaciones de configuración tanto circular como cuadrangular.
- Disponibilidad en todas las medidas de diámetro.
- Descarta la necesidad de un ensamble inicial.
- Omite la necesidad de diseño tridimensional.
- Se conforma a la forma del pozo, incluso si presenta irregularidades.
- Contempla la renovación de la base del pozo.
- Devuelve la impermeabilidad al sistema.
Características técnicas
La producción de la manga vertical se lleva a cabo siguiendo los más exigentes criterios de calidad. Esta manga de fibra de vidrio ofrece la durabilidad necesaria para hacer frente a la severa corrosión química.
- Fibra de vidrio con un peso específico cercano a 730g/m2
- Variante saturada con resina poliéster ideal para sistemas de aguas urbanas
- Variante saturada con resina viniléster especializada para sistemas de aguas industriales
- Constituidos por materiales que resisten el embate de agentes químicos y temperaturas elevadas
- Diseñado para el manejo eficaz de múltiples tipos de líquidos.
Para más información, no dudes en contactarnos.
Patologías comunes en pozos de registro
En el transcurso de la operación de un pozo de inspección, la interacción constante con aguas negras compromete y amenaza su integridad. El método de reparación a través de revestimiento con manga vertical repara todas las afecciones típicas de los pozos de inspección.
Raíces y otras obturaciones
Una afección habitual en los sumideros es la presencia de obstrucciones. Dichas obstrucciones en sumideros pueden originarse a raíz de elementos exógenos como raicillas arbóreas, a una configuración deficiente del sumidero o una conservación en condiciones subóptimas.
Corrosión
Los elementos más habituales utilizados en la creación o producción de pozos de inspección tienden a experimentar desgaste corrosivo progresivamente. La velocidad a la que se presenta la corrosión varía según la estructura molecular de las aguas servidas que circulan por ellos.
Intervenir de manera precoz en pozos aquejados por la corrosión previene contratiempos más graves que puedan afectar la hermeticidad.
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Pérdida de estanqueidad
La degradación de la infraestructura de una cámara de inspección acaba afectando la hermeticidad del sistema.
Esta pérdida de hermeticidad representa un riesgo ecológico, ya que provoca que los desechos líquidos se filtren hacia el entorno natural, polucionando la tierra subyacente y los mantos acuíferos.
Manguito de estanquiedad - Rehabilitación de pozos de registro
La funda de sellado brinda una solución óptima para su uso en cámaras de inspección, adaptándose eficazmente a los reajustes en la parte superior del pozo debido a las cargas vehiculares.
El sistema de sellado opera mediante un mecanismo mecánico con una banda de sello expandida de 500 mm de amplitud. El rango de diámetros disponibles se extiende desde DN-400 mm hasta DN-1200 mm.
Representa la alternativa perfecta para la corrección de escapes provocados por esfuerzos mecánicos, variaciones térmicas, movilidad terrestre y la degradación de los enlucidos.
Renovación de pozos de revisión y de registro sin obra
El procedimiento Aarsleff para la modernización de cámaras de inspección se caracteriza por su eficacia y adaptabilidad. Este sistema promete una durabilidad extensa y una opción rentable. Se emplea concreto lanzado. Dicha técnica ha evolucionado progresivamente a lo largo de los años, lo que actualmente permite la actualización de cámaras de inspección de manera ágil, eficiente y con mínimas molestias para el entorno. Este proceso es adecuado para la restauración de cámaras de inspección con diámetros que van desde DN500 hasta DN1250 y a profundidades de hasta 10 metros.
Antes de proceder con la modernización de las cámaras de inspección, se verifica minuciosamente la limpieza de las mismas y se asegura que cualquier filtración haya sido debidamente sellada. Por solicitud expresa, se procede al desmontaje de las escalas de acceso. Se realizan reparaciones en caso de encontrar anomalías significativas en la infraestructura. Las entradas se cierran temporalmente, si fuera necesario. Se lleva a cabo una valoración de la fortaleza del muro de la cámara existente para definir el grosor apropiado del concreto lanzado que se aplicará, que puede ser de hasta 40 mm.
El concreto lanzado se aplica utilizando una boquilla diseñada especialmente para insertarse en la cámara, suspendida de un soporte situado en la entrada de la misma. Es crucial alinear adecuadamente la boquilla con el centro de la entrada de la cámara. Una vez que se ha ajustado con precisión la boquilla de pulverización, se maneja manualmente en movimientos ascendentes y descendentes para lograr el grosor de concreto necesario.
El proceso de rehabilitación concluye con una verificación detallada para confirmar que se ha obtenido el grosor requerido en los muros. Para finalizar, se alisan las superficies ásperas, se realiza la limpieza final de la cámara, se reinstalan las escalas y se desbloquean las entradas.
- Rehabilitación de Pozos de Agua
- Rendimiento Reducido por Incrustaciones o Bio-incrustaciones
- Falla Causada por Taponamiento Físico y Bombeo de Arena
- Falla Causada por Corrosión
- Falla Causada por Daño de la Bomba
- Resumen
- Características generales
- Características técnicas
- Patologías comunes en pozos de registro
- Manguito de estanquiedad - Rehabilitación de pozos de registro
- Renovación de pozos de revisión y de registro sin obra